un dia sin que me peguntes como , Sally se dio a dibujar sus cartoncitos de carton , asi dijo de formas bonitas con coloes dio toque a su mundo con soles y bolitas de lunas que eran hermosos , con ellos leia la suerte, en su cama, sin que nadie viera nada, no su hermano que de todo ella visaba, le dio por oir las voces las las estrellas que ella habia dibujado, se quedo dormida y asi Sally se dio cuenta que poseia ese algo saleroso, que traia en las manos y en las mejillas por que se sentia tiesa casi fria cuando acababa de decir lo que se tenia que decir cuando las recitaba , con gracia y viveza fija en su corazon la alegria rebosaba ciencia , dijo a una amiga
cuando se dio a pregonar que en el cafè las tiraria
y asi Manolo, el del cafè, oyo como ella daba cada consejo a veces con la cabeza asentia cuando le parecìa pero la mayoria de las mujeres que iban , quedaban pensativas y tomaban mas cafe, cosa que le agrado
pero el majo , se dio a meterse en el resultado , cuando en otra ocasion les preguntaba que como les habia ido con el consejo del cartoncito
no les parecio ni a Sally ni a las mujeres y lo sentaron en su silla a pensar que eso a èl no le iba a hacer bien , que jugara con los resultados, no
por que seguro iria inlfuyendo en los asiduso del lugar
Manolo le paro a su asunto , dedicandose a servir y ganar plata
asi sin mas, Sally tuvo quien la defendiera
y ya
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